A medida que los días se hacían más cortos y las noches más largas, nuestros antepasados ajustaban su horario en consecuencia: acostándose antes y levantándose más temprano.
El cuerpo humano a menudo reacciona mal al ir contra la naturaleza, así que la mayoría de nosotros funcionamos mejor si tratamos de ir más despacio una vez que aumenta la oscuridad.
Utiliza este conjuro para recordar a tu cuerpo y espíritu que es una buena idea ajustar tu velocidad y expectativas a los cambios de estación:
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!